quarta-feira, 23 de agosto de 2017

MUNDIALES DE LUCHA

Pino conserva la dinastía


El joven capitalino Oscar Pino demostró que no viajó a la capital gala para cumplir vaticinios y sí a demostrar que el relevo del tricampeón olímpico y pentacampeón mundial Mijaín López se encuentra garantizado




Pino se agenció su primera presea en justas del orbe. Foto: Roberto Morejón
Muchos –entre quienes me incluyo– no vaticinábamos que el renovado conjunto antillano de lucha, estilo greco, alcanzara presea alguna en el Campeonato Mundial de la disciplina. A la justa que por estos días acoge París, Francia, arribó un quinteto antillano con cuatro debutantes en este tipo de certámenes, por lo cual se vislumbraba como el objetivo esencial ganar experiencia en un evento, de cara al naciente ciclo olímpico.
Sin embargo, el joven capitalino Oscar Pino demostró que no viajó a la capital gala para cumplir vaticinios y sí a demostrar que el relevo del tricampeón olímpico y pentacampeón mundial Mijaín López se encuentra garantizado. Pino se agenció una sorprendente presea de bronce en la división de los 130 kilogramos durante su primera incursión mundialista, luego de superar 3-1 al bielorruso Kiryl Hryshchanka en la pelea por el tercer escaño. El cubano conservó la alcurnia de la escuela antillana entre los superpesados, iniciada por Héctor Milián y continuada por el propio Mijaín.
Con su metal bronceado, el capitalino extendió a nueve la racha de preseas alcanzadas consecutivamente por Cuba en justas universales en la máxima 
división, además de presumir por el hecho de ceñirse una presea en su estreno en campeonatos del orbe.

En la Ciudad de la Luz, Pino arrancó con buen pie al doblegar 5-1 en su
primer combate al subcampeón europeo Balint Lam, de Hungría. Seguidamente, en la fase de octavos de final superó sin contratiempos 4-0 al búlgaro Miroslav Metodiev.

El campeón panamericano no se conformó con un puesto entre los ocho primeros y salió por un triunfo que lo colocara en semifinales. Su escollo fue el alemán Eduard Popp, a quien desbancó 3-1 gracias a dos penalidades y un empuje fuera del colchón.
La escena quedó lista para la discusión del pase a la gran final, instancia en la cual compartió la lona nada más y nada menos que con el turco Riza Kayaalp, subtitular de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, cita en la que fuese derrotado por el «Gigante de Herradura», en un combate que ni él (el turco) ni nosotros olvidamos por ese espectacular supplé que le aplicara el pinareño.
En busca de una especie de «revancha» ante otro representante de la Mayor de las Antillas, Kayaalp salió con la intensidad que lo caracteriza en los compases iniciales y logró sacar al cubano fuera del área de pelea gracias a su clásica embestida. Pino fue penalizado por pasividad y culminó los tres primeros minutos con marcador desfavorable 0-2.
No obstante, el capitalino no se amilanó y salió a la caza de su rival, quien se dedicó a defender y aguantar el marcador, estrategia que le costó una sanción arbitral convertida en un punto para el cubano. Cumplido el tiempo reglamentario, el marcador no se movió y el europeo se llevó una cerrada victoria 2-1.
«No hizo nada en los tres minutos finales (Kayaalp), se merecía una segunda penalidad, pero los jueces no quisieron aplicársela», manifestó en la sede el entrenador principal Raúl Trujillo al colega Rudens Tembrás, del semanario JIT.
«Siempre he entrenado duro para tener un gran resultado, Mijaín me dio la oportunidad de estar aquí y traté de representar a Cuba lo mejor que pude» recalcó Pino al propio Tembrás.
Kayaalp obtuvo su tercer cetro del orbe tras doblegar al estonio Heiki Nabi 2-1 en la gran final. En esta división Chile se agenció su primera presea en la historia de los campeonatos mundiales de este deporte por medio del gladiador de origen cubano Yasmani Acosta, quien fue superior al ucraniano Mykola Kuchimii 2-0 en la disputa de la otra presea de bronce, muestra fehaciente de la tremenda fuerza de la escudería cubana en la modalidad clásica dentro de las divisiones superpesadas.
La actuación antillana se completó con el santiaguero Miguel Martínez, único del conjunto con experiencia en este tipo de certámenes, quien quedó por debajo de las expectativas al caer en su debut ante el kazajo Almat Kebispayev (5-2). Culminadas las acciones en la greco, Rusia se llevó el primer puesto por equipos gracias a sus 46 unidades –a pesar de no ganar ninguna corona–, seguidos por Irán con 36.

Nenhum comentário:

Postar um comentário

  A corrida Amigos de Aço “nasceu” em 2022, quando o 5º BPM recebia em sua unidade 80 alunos soldados para o Curso de Formação de Soldados –...